Hoy, después de una conversación, pude nombrar mi mayor
miedo, el más grande de mis problemas… tengo miedo a quedarme solo de nuevo,
hago un sobre esfuerzo para evitar que así sea, y evado la realidad para no
soltar a las personas. Como un animal desesperado que actúa por supervivencia al ser arrinconado, así me siento con la idea de una vida desolada, creo que es
algo patético, pensaba que ya dominaba esa falencia mía, pero veo que solo la
he maquillado. Me aferro demasiado a las personas, y creo que solo las termino lastimando
al agarrar tan fuerte esos lazos. Ya he perdido la idea de la familia, ya he
perdido la idea de tener amistades, no quiero seguir perdiendo a las personas
que han llegado a darle algo de sentido a mi vida, pero para ello debo aprender
a soltarlas, dejarlas ir y fluir, que cumplan sus ciclos, pero es tan difícil,
y se siente tan contradictorio. Sé que no basta con tener buenas intenciones, sé
que no basta con intentar hacer felices a las personas para que no se vayan de
mi lado y me duele saberlo, me hace sentir impotente, insignificante, sin
control sobre mi vida. Pero es mi problema, no debo hacer que sea problema de
otros, me duele reconocerlo, pero ya puedo verlo, parece tan sencillo todo, y a
la vez tan complejo y ambiguo,
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